sábado, 12 de octubre de 2013

"Te rento un espacio de mí calle”.


Ejercicio de observación.

Este ejercicio de observación lo realice en las inmediaciones a la Expo Ganadera, justo en las calles Amacueca, Huascato, Montemorelos y Delicias en la Col Álamo Oriente de Tlaquepaque Jalisco; el día sábado 12 de octubre de 2013, a las 20:30 hrs. En estas calles se ubican significativamente casas y departamentos habitación, además de las oficinas de la SAGARPA, también existen algunos otros negocios: vinatería, mueblería, papelería, lavandería, gasolinera, tiendas de conveniencia y talleres mecánicos. 

Las actividades más relevantes en estas calles tras la observación especifica, son las que tienen que ver con el comercio pues se instalan numerosos puestos de comida, dulces y bebidas,  otra actividad que ahí se reproduce es el tránsito peatonal y de vehículos que es lento y constante y que sin duda tiene que ver con el horario en mención.  Las acciones principales que ocasionan lo anterior son la exhibición de ganado y maquinaria para trabajar el campo, acciones que se llevan a cabo dentro del lugar y durante el mes que se desarrolla dicha exhibición, así como también los conciertos de música norteña y de banda, la venta de bebidas alcohólicas, comida, ropa, calzado, sombreros y souvenirs.

Sin duda la actividad económica informal es la que se reproduce en las calles de manera simultanea, pues lo que llamó particularmente mi atención es el negocio de apartar los espacios públicos como lo son las calles aceras y camellones, para ofrecerlos a quienes arriban buscando un espacio para su vehículo y están dispuestos a pagar entre 100 y 200 pesos por este lugar y “servicio”. (Cabe mencionar que la Expo tiene servicio de valet parking, pero me di cuenta que por alguna extraña razón el precio sospechosamente era variable).

Lo anterior encaja con procesos del lenguaje y comunicación, económicos, de movilidad, de reproducción de trabajo formal e informal, de violación de normas de seguridad municipal y de vialidad estatal, de impacto ambiental, de esparcimiento y ocio.

Dos frases que ejemplifican lo arriba expuesto podrían ser las siguientes:

  • “¿Ocupa lugar jefe? aquí tengo uno, yo se lo cuido”.       
  • “Por adelantado, luego salen bien pedas y no me pagan”.

Estos dos enunciados resumen drásticamente la realidad compleja que se desarrolla en este contexto, mediante el sistema del lenguaje, se relaciona por un lado quien llega en vehículo a las inmediaciones de la Expo para destinar su tiempo al ocio, con quien ya se apropió de la calle para ofrecer indebidamente un espacio que es público. Existe entonces la necesidad y la posibilidad de hacer un intercambio económico ante la poca o nula vigilancia de las autoridades y ante una actitud normalizada de todos los actores.
   


A nivel de políticas públicas creo conveniente revisar y en su caso replantear la normatividad existente en relación a quienes se apropian de los espacios públicos para hacer de esto un negocio particular. Por comentarios de una persona que se dedica a esta actividad (que no es vecina de la zona) en una tarde-noche de fin de semana los ingresos van de 600 a 1200 pesos. Cabe mencionar que algunos vecinos de la zona participan en esta actividad pero la mayoría padece las consecuencias como puede ser la saturación de las calles, molestias por bloqueos de cocheras, confrontaciones e inconformidades con asistentes a la Expo o con los mismos aparta-lugares.


Destacar que la misma zona la observé al día siguiente durante la mañana (domingo 13 de octubre 9:00 AM) y pude constatar el mecanismo para la apropiación de las calles y aceras por los aparta-lugares mediante cubetas, piedras, palos y lazos. Me da la impresión que estas personas se coordinan para trabajar por turnos y no perder los espacios que otro pudiera apropiarse.  








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