martes, 23 de mayo de 2017

CORRE LOLA CORRE/ Isabel Gutiérrez.


¿Estamos dispuestos a tomar o dejar la responsabilidad de una decisión? 

 Desde una perspectiva de la complejidad, se pone en descubierto hacía donde o con qué sentido una decisión que involucra a una o varias personas puede cambiar la situación o el contexto en el que se encuentran estas. 

La película de Corre Lola Corre, se enmarca en un plano donde los protagonistas simbolizan las consecuencias, provocaciones, accidentes, causalidades que pueden desatarse al tomar una decisión, siendo esta en beneficio individual y provocar una tragedia colectiva ó por el contrario, tomar una decisión que sea pensada, analizada y llevada a otro plano donde se prioricen consecuencias y beneficios, resultando favorables tanto en el plano individual como en el colectivo. 

En Corre Lola Corre, se descubre que dentro de una multiplicidad de escenarios una decisión puede desarrollarse con "x" cantidad de situaciones, que tienen que ver con cómo, con quién, hacía quién, en qué espacios y sobre todo, bajo que contexto se toman las decisiones.

La película desarrolla distintas opciones donde ambos protagonistas participan en la toma de decisiones y de estos a su vez, se desprenden más actores involucrados que parecieran estar fuera de la vida de los protagonistas, pero que en realidad juegan un papel importante en la toma de decisiones de los mismos.

El papel de la decisión mostrado en la película de Corre Lola Corre, nos hace ver, que dentro de cualquier plano de la decisión podrían participar distintos agentes, que al mismo tiempo, estarían provocando distintas consecuencias dentro de la decisión individual de los protagonistas.
La decisión, dentro de la película, puede llevarte a pensar en como se estructura un dilema, cómo se soluciona o con que medios se cuenta para poder resolver la circunstancia en la que se encuentran los protagonistas.


Dejando ver, como las decisiones funcionan o fracasan, como pueden minimizar o maximizar la problemática. Todo aquello que nos influye y que nos sobre pasa, funcionando a través de un sistema que a su vez se desenvuelven en subsistemas complejizando cada vez más la realidad de los actores.


En cada decisión tomada, habrá dimensiones donde los protagonistas estén sujetos a las acciones sociales que a su vez actuarán en consecuencia de los mismos protagonistas. Es pues, que de la decisión se desprenden sujetos que se mantienen quietos, sujetos que actúan y sujetos que hacen o están para dirigir o cambiar las circunstancias de las decisiones.


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