Una tarea tan “común”
y que quizá forma parte de las actividades cotidianas de muchos de nosotros y
que puede asumirse como algo simple así como lo es la limpieza del hogar, sin
embargo no es una tarea sencilla, desde su inicio hasta su fin, desde el qué se
va a limpiar?, el cómo se va a limpiar?, quién va a limpiar?, con qué se va a
limpiar?, cuándo se va a limpiar?, etc. Preguntas que aparentemente se
responden solas, pero no es así, todo tiene su que ver.
La complicación empieza
desde que asumimos que la limpieza del hogar es una tarea algo parecida a un círculo
vicioso, una tarea que no tiene un fin definitivo.
Al hablar de hacer
la limpieza del hogar es importante tomar en cuenta algunos aspectos, tales
como el tamaño de la casa que se va a limpiar, cuantas personas viven ahí, que
edades tienen esas personas, con qué frecuencia se hace el aseo normalmente, que otras actividades tiene las personas que
habitan la casa, si a alguna de ellas le causa alergia algún producto también debe
tomarse en cuenta, bueno la lista sería interminable.
Ya aterrizándolo en
el caso de mi hogar cualquiera pudiera pensar que no es nada complicado hacer
el aseo ya que mi casa siempre se encuentra aparentemente limpia (no hay niños),
se hace el aseso general (barrer, trapear y sacudir) una vez por semana y ya entre semana cada que
se requiera una “barridita”. Somos cinco personas las que habitamos, sin
embargo si hablamos del aseo a mi papa no se le toma en cuenta, el trabaja prácticamente
todo día. El aseo general lo hacen entre mamá y mi hermana menor (20 años), esto
cuando mi otra hermana y yo vamos a la escuela ya que también trabajamos, solo
nos toca lavar los trastes o lavar.
El quehacer se
divide en dos partes: planta alta y planta baja, es decir aparentemente no debería
existir problema porque una está arriba (hermana) y la otra abajo (mama), sin
embargo por sus formas tan diferentes de ser se vuelve complicado, mi hermana
es muy perfeccionista y tarda mucho en hacer las cosas y a mi madre le gustan
las cosas al momento pero bien hechas. Mi madre acaba antes y, al barrer mi
hermana las escaleras cae polvo en la parte de abajo, lo cual también es
problema, mi mama acomoda de una forma, mi hermana lo cambia, entre algunas
otras cosas.
Otra complicación es
que vivo en un lugar en donde hay algo de tierra, en la parte de atrás ya no
hay nada más que sembradíos y por tanto hay más polvo, además de algunos
vecinos que no acostumbran barrer sus calles.
Al mismo tiempo que
comparto algo de la complejidad de hacer la limpieza de mi hogar, me doy cuenta
que en realidad es más compleja de lo que yo pensaba al iniciar estos párrafos.
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