Link a la presentación: http://es.scribd.com/doc/192315141/A-Realidades-Complejas-MUSEOS-Presentacion
INTRODUCCIÓN
En
septiembre del presente año, El
Informador presentó una nota titulada “Museos en Jalisco: no falta cantidad
sino calidad”, la cual hacía referencia a la baja anual en la audiencia de las
instituciones mencionadas. Se explica que es Jalisco el segundo estado a nivel
nacional con mayor cantidad de este tipo de instituciones culturales en donde
existe uno por cada 64,500 habitantes, 114 recintos en total. La baja
mencionada se ha dado especialmente en los museos dependientes al Ayuntamiento
de Guadalajara y Zapopan[1]. El portal virtual del
diario sugería la discusión de los posibles factores a los que se debe tal
suceso, ¿es la temática, el contenido, la interacción con el público o la falta
de difusión de los eventos y exposiciones que albergan estos recintos
culturales los qué influyen en la baja audiencia?
Suena
paradójico que mientras este es el escenario de los museos, en la ZMG existe de
manera cada vez más recurrentes los eventos públicos culturales, de igual
manera en el sector privado y de
asociaciones civiles encontramos apertura de centros culturales,
cafés/galerías, bazares culturales, entre otros conceptos dedicados a la
difusión y gestión cultural. Si podemos hablar de que poco a poco los tapatíos
reflejan un apego de frecuencia más alta a las experiencias culturales y
artísticas, ¿Qué está pasando con los museos? La resolución indicada por la
redacción de El Informador expresa
una visión reduccionista, donde la falta de público corresponde a la falta de
tecnología implicada en el museo.
En
base a dos ejes se intentará analizar y explorar las interrelaciones de actores
y sus elementos, expresando una visión más compleja de la problemática actual
de los museos en el estado, los cuales giran entorno al público y los
contenidos y la logística museográfica en sí.
ANTECEDENTES
El
nacimiento de los museos data de aquellas épocas en la que la aristocracia
abría las puertas de su palacio, una vez al año, para poder mostrar al pueblo
el acervo de obras artísticas que se tenía bajo su propiedad, y que sólo durante
ese día, o tiempo, podía ser mostrado. Desde Hernández (1998: 65) el
surgimiento del museo se debe plantear entre dos situaciones, la primera el
surgimiento del coleccionismo y la segunda desde la ilustración, siendo está la
mayor impulsora del museo público.
La
comunidad de los museos del mundo (ICOM siglas en ingles) y según los
lineamientos adoptados durante la 22ª Conferencia general de Viena (Austria) en
2007, se estipula que la definición global de museo refiere a “una institución permanente, sin fines de
lucro, al servicio de la sociedad y abierta al público, que adquiere, conserva,
estudia, expone y difunde el patrimonio material e inmaterial de la humanidad
con fines de estudio, educación y recreo”.
A
continuación se desarrollaran los ejes que creemos necesarios para obtener una
mejor comprensión del fenómeno de los museos y su baja en la audiencia.
PÚBLICO
|
·
Generalidades del público (ingreso económico como
restricción, horario de recreación
disponible).
·
Capital cultural (Potencialidad de consumo de diversos
productos culturales, frente a los museos).
·
Escuela (Para Bourdieu el principal vínculo
Museo/Público es establecido por ésta institución).
|
MUSEO
|
·
Presupuesto (recorte actual a Cultura, museos en
particular).
·
Gestión pública.
·
Logística Museográfica (Gestión interna de los museos,
estética visual, acceso a la información necesaria, seguridad).
·
Innovación en contenido (Exposiciones y tecnología).
|
PÚBLICO
El
público, como actor que se desarrolla en un sistema en el que se tiene
múltiples opciones y debe tomar una decisión de asistir o no, y en dado caso de
asistir a dónde, es básico de analizarse en este estudio, y de estudiar especialmente
sus generalidades. Pues de éstas podemos lograr comprender algunas de las
razones de porqué la gente no asiste, o ha dejado de asistir, a los museos.
En
primer punto tenemos que mencionar que desde la crisis del 2008 el ingreso
familiar:
(…)
se redujo 12.75 por ciento durante el sexenio pasado y el de cada persona
disminuyó 7.12 por ciento, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y
Gastos de los Hogares (ENIGH), elaborada por el Instituto Nacional de Estadística
y Geografía (INEGI) (Posada, 2013).
Analizando
la situación económica actual junto con el ingreso
económico de las personas y los precios de la taquilla en los museos, vemos
que estos centros por más que en el discurso se diga están destinados para que
sean consumidos por la gente, los datos dicen otra cosa.
La
relación que realiza el público está limitada respecto al gasto en entrada y lo
que obtendrá en los diversos espacios culturales. Pues teniendo en cuenta que
el salario mínimo se encuentra alrededor de $64.08, y la entrada al Instituto
Cultural Cabañas está en $45.00 para el adulto mexicano, esto pensando en una
persona sin familia que no tiene que pagar la entrada de algún niño ($20), ni
el transporte. Ya que el 60% de las familias en Jalisco vive con menos de 3.5
salarios mensuales ($6,500), y la entrada a los museos oscila entre medio
salario mínimo por persona, vemos pues que necesariamente desde los públicos se
debe realizar un análisis de costo-beneficio sobre lo que cuesta una ida
recreativa al museo, y lo que de ella se obtiene.
Sin
embargo no se puede dejar fuera del análisis las visitas escolares, pues según
un análisis exploratorio de datos realizado por la CONACULTA (2008-2009), se
revela una fuerte relación existente entre el sector educativo y la
asistencia a los museos. De 6000 encuestados el 39% asistió por recreación,
mientras que el 35% por motivos educativos. El dato más representativo de los
visitantes, expresó que se enteró de la existencia del museo por un profesor o
alguna publicación educativa.
Esto
nos lleva a cuestionarnos sobre el consumo
cultural existente en nuestro país, pues si los museos no es algo
representativo en la ciudadanía, ¿qué sí lo es? En la encuesta nacional
realizada a 32 mil personas por la CONACULTA (2010), el cine es el situado con
mayor porcentaje (75%), seguido por alguna presentación de danza con el 66%
(incluyendo escolares). Por otra parte los museos cuentan con el 55% de respuestas
positivas de haber entrado alguna vez a alguno, mientras que el teatro cuenta
con tan solo el 32%.
Desde
Bourdieu (1966) vemos la problemática de los horarios, pues los museos cierran sus puertas muy temprano para el
trabajador común y corriente. Éstos parecen estar hechos solo para aquellos que
salen de trabajar temprano, y tienen tiempo de asistir al centro cultural.
Además tendríamos que tomar en cuenta también, que la mayoría de la población
mexicana tiene en general una representación social negativa sobre los museos,
y en general, lo relacionado con la alta
cultura.
CONTENIDOS
Y LOGÍSTICA MUSEOGRÁFICA
Dentro
de los fenómenos que tomamos en cuenta dentro del museo en sí está tanto la
logística misma del museo, así como lo gestión pública que lo afecta y limita a
actuar de ciertas maneras. Dentro de la gestión
pública vemos que en este año hubo cambios políticos, no nada más de
personas, sino en general vimos un cambio de partido político que tomó poder en
el estado. Específicamente en el MAZ, vimos que la nueva subdirectora fue, por
un día, la hermana del actual gobernador, en donde se le comenzó hasta
construir una nueva oficina. Teniendo como referente los cambios en el poder
estatal se puede suponer, de cierta manera, que esto haya afectado el desempeño
de los museos dependientes del Ayuntamiento.
En
lo destinado al presupuesto económico
los inmuebles pertenecientes a los museos deben competir junto a otras
actividades culturales para que se les asigne. Sobre la gestión de museos se
desconoce a ciencia cierta cómo se comprenderá el subsidio, lo que se puede
expresar es que ciertamente no es prioridad para la Secretaria de Cultura (El Informador, 2013, enero 17). El
objetivo principal de año entrante para la Secretaria de cultura es financiar
creación de proyectos, investigación, promoción, así como difusión cultural y
artística en el Estado, sin embargo no se ve un interés principal por parte de
la institución cultural en museos. En términos generales, aunque se incrementó
el presupuesto a la Secretaria de Cultura en 12.18% respecto al año pasado, el
Instituto Cultural Cabañas obtendrá la misma cifra del año pasado (con un
subsidio de 17 millones 342 mil pesos). Aún cuando a principios del año la
dirección del Cabañas expresó que su gasto corriente anual asciende a 19
millones.
Otro
factor a mencionar en el análisis es la falta
de atención de la que ya varios medios han mencionado (El Informador, 13 de
agosto 2013), pues los museos sufren de escasez de personal, en donde si uno
desea obtener información de las obras expuestas, solo encuentra las cédulas.
Por otra parte, quizá los contenidos de las exposiciones que se muestran no son
de interés para la mayoría de las personas; pues vemos cómo museos como el de
cera tienen un flujo constante de personas. Hay un mayor interés por aquello
que representa la cultura popular o de masas, que los recintos culturales no
están cubriendo.
Referente
a la innovación tecnológica de la
que la nota, por la que esta problemática decidió estudiarse, habla podemos
decir que la tecnología aplicada en las últimas décadas ha impactado enormemente
las dinámica de relaciones sociales, y aunque puede considerase antagonismo la
tecnología aplicada a los museos, las espacios y personas que defienden la
iniciativa lo hacen desde el postulado en que la tecnología sirve de forma
interactiva de la información, contenido y el receptor (visitante). Para Brean
Duarete, vicepresidente y supervisor del área de didácticas de amigos de los
museos en bellas artes (España), en entrevista con Adriana Gáldiz, expresa dos
nociones básicas en cuanto a la inserción de tecnología e innovación digital de
los museos; 1) La tecnología solo cambia la forma de interactuar el contenido,
es un aporte y no un sustituto, que además facilita la gestión interna del
museo; 2) Una de las claves fundamentales uso de estas herramientas
tecnológicas es que lo local participa dentro de lo global.
Dentro
de los museos más representativos a nivel global encontramos que el Louvre, el
americano de historia natural y el MOMA de Nueva York, hacen gran uso de la
tecnología. Pero donde la expresión principal es el contenido que ofrecen,
puesto que la infraestructura técnica se expresa más en poder acceder desde
dispositivos móviles a cintas de audioguía en diversos idiomas, o aplicaciones
de la ubicación exacta de los cuadros en particular y como complemento
informativo sobre la obra. La cuestión a debatir dentro de Jalisco sería
¿cuántas personas cuentan con un celular que les permita llevar a cabo estas
acciones? Y de ser bastantes, ¿en verdad aumentaría el flujo de personas a los
museos?
CONCLUSIONES
A partir del esquema explorado, encontramos
una serie de elementos que pueden expresar porqué el público elige no visitar
un museo (su capital cultural, lo expuesto en el museo, etc.), así como también
vemos las problemáticas dentro de la misma institución cultural. Localizamos
entonces como conclusiones dos puntos básicos que retratan, desde nuestro punto
de vista, la realidad compleja de los museos.
En primer lugar se encuentra la apuesta, o el
intento, por la tecnología en la renovación de los museos, lo cual retrata esta
idea de posicionar o tematizar a Jalisco como una ciudad global. Desde Safransky (2004) uno de los principales
procesos del globalismo es la transición de la ciudad nacional a la ciudad
cosmopolita. Sin embargo, la identidad cosmopolita se nos presenta desde
Castells (2009) como una experiencia de homogeneización -proyecto de élites económicas-,
en donde inmersos en la sociedad red, las ciudades pasan a ser influenciadas
por los flujos (informáticos, de capital, cultural). Una corriente más bien
ahistórica local, pero libremente global.
Hay una legitimación de la cultura más allá de
lo que es “alta cultura”, que también abarca la cultura cosmopolita, en donde
se olvida o se omite la cultura popular, o los productos culturas de masas que
son de atracción para un gran porcentaje de la población. Hay una oposición y
separación de la identidad nacional y la ciudad global. Podemos comprender
entonces un poco las representaciones sociales negativas que se tienen de la
alta cultura, pues en lugar de querer crear en un espacio una misma identidad,
vemos como ésta se sigue fragmentado (al igual que la ciudad). Además de que la
cultura legitimada, se consolida desde los que crean y difunden la cultura
(Becker, 2008), por lo tanto, no hay cabida para las masas, ni para lo popular.
Ya que, regresando a Castells, las megaciudades se conectan con el exterior
(redes globales) mientras que están desconectadas de las poblaciones locales. Actualmente
se alude a que el museo es la expresión de la identidad cultural regional o
nacional, como institución el problema se encuentra en si la identidad
expresada como colectiva corresponde a la identidad más próxima de la
intersubjetividad local en general. En la construcción de la identidad cultural
encontramos de un lado el discurso de la cultura dominante y en el otro extremo
la cultura popular.
Por otra parte, Hernández (1998) afirma que
con la debilitación del Estado positivista, visto como la institución
interesada en hegemonizar la cultura, los museos públicos expresan una caída
frente a otras instancias culturales. Los museos suelen expresarse como
sinónimo de la identidad cultural de la localidad, en el México
posrevolucionario el Estado se adjudicó una política cultural fuerte con fines
de legitimación, pero para finales del siglo XX, el discurso global permea los
ideales nacionalistas. Esto nos lleva a nuestro según punto de conclusión –que depende
de las exigencias de la ciudad global–: el posicionamiento de lo privado sobre lo público. Así notamos
un incremento de galerías y café-galerías en la ciudad, donde solo aquellos con
poder adquisitivo, así como con capital cultura y social, pueden acceder.
La cultura se ve actualmente desde el mercado,
en donde ni los amantes del arte ni los (posibles) visitantes de los museos son
tomados en cuenta; lo que interesa para el mercado de la cultura son los
coleccionistas, los mecenas, los dealers,
los mismos artistas, etc. Vemos que el gobierno ya no tiene el objetivo de adquirir
obra para crear un catálogo, sino que se conforma con llevar a cabo pequeños
espectáculos y animaciones fugaces, y además con un mínimo de presentaciones. La
cultura que se expone en el museo mexicano no es cosmopolita (aún), ni es redituable.
“Nadie” obtiene beneficios de ella.
REFERENCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
Becker,
H. (2008). Los mundos del arte.
Bernal: Universidad Nacional de Quilmes.
Bourdie,
P. (1966). El amor al arte. Los museos
europeos y su público. Paidós Estética.
Castells, M. (2009). La era de la información, tomo I, La Sociedad red. México: Siglo
XXI.
Hernández,
F. (1998). Manual de museología. Madrid.
ICOM
(s.f). “Definición del Museo”. Disponible en: http://icom.museum/la-vision/definicion-del-museo/L/1/ (consultado el 20 de
octubre del 2013).
Posada,
M. (2013, julio 17). “Grave caída del ingreso familiar”. La Jornada. Política. p. 2.
Redacción
(2013, Agosto 13). En los museos… que la suerte te acompañe. El Informador. Disponible en: http://www.informador.com.mx/cultura/2013/479572/6/en-los-museosque-la-suerte-te-acompane.htm
Redacción.
(2013, Enero 17). Museos de Guadalajara desconocen su presupuesto para 2013. El Informador. Disponible en: http://www.informador.com.mx/cultura/2013/430861/6/museos-de-guadalajara-desconocen-su-presupuesto-para-2013.htm
Redacción.
(2013, Septiembre 16). Museos en Jalisco: no falta cantidad sino calidad. El Informador. Disponible en: http://www.informador.com.mx/cultura/2013/485595/6/museos-en-jalisco-no-falta-cantidad-sino-calidad.htm (consultado en
septiembre del 2013).
Safranski,
R. (2004). ¿Cuánta globalización podemos soportar?. Barcelona: Editorial Tusquets.
[1]
En el Museo de Arte de Zapopan (MAZ) el número pasó de 27 mil 059 en 2011 a 20
mil 314 en 2012. En general los recintos que dependen del Ayuntamiento tapatío,
la cifra pasó de 341 mil 604 visitantes en 2011 a 222 mil 857 en 2012.
No hay comentarios:
Publicar un comentario